La Fundación “El faro” fue declarada de Interés por la Legislatura de la Ciudad
La Asociación Civil fue reconocida por su noble labor al acompañar a las personas mayores en su última etapa de vida.
El Cuerpo Legislativo declaró de Interés para las Personas Mayores de la Ciudad las actividades realizadas por la Fundación El Faro. El acto se llevó a cabo en el Salón Montevideo y contó con la presencia de la diputada y autora del proyecto, Patricia Glize; la coordinadora general, Mariana Perez; y la fundadora y directora, Viviana Bilezker.
La Fundación tiene como principal objetivo acompañar a las personas mayores al transitar la última etapa de su vida, brindando apoyo integral, tanto a quienes atraviesan este proceso, como a sus familiares y entornos cercanos.
El Faro propone abrir espacios de diálogo, desde una mirada humanista, invitando a la reflexión sobre temas considerados tabú: como la muerte y el proceso de la misma. La idea principal es ayudar a que las personas integren la conciencia de finitud como parte de la vida, generando un acercamiento más pleno, sereno y consciente a esta etapa.
Además, desarrollan diversas actividades que incluyen talleres, capacitaciones y asistencia personalizada, dirigidas no solo a familiares, sino también a cuidadores, con el objetivo de aliviar la carga emocional de quienes acompañan a personas con demencia, como el Alzheimer.
Patricia Glize agradeció a los presentes y realizó un emotivo recorrido por su experiencia personal y mencionó que El Faro “es una caricia al alma. Invitan a reflexionar sobre el valor del acompañamiento; son un ejemplo de calidez, empatía y solidaridad. Ofrecen consuelo y dignidad en los momentos más difíciles de nuestras vidas”.
Por su parte, Mariana Pérez, quien forma parte de El Faro desde 2018, donde se formó como Acompañante, Doula de Fin de Vida y Diplomada en Nueva Tanatología, aseguró que “este reconocimiento nos honra como tal y reafirma nuestro camino, donde la muerte no es tabú, sino que es parte de la vida”.
Finalmente, Viviana Bilezker agradeció a los presentes, a sus padres, y a todos los que hicieron posible el proyecto. Recorrió los inicios de la fundación y el propósito que los unió: comunicar cómo prepararse para la muerte. Además, expresó “todos somos acompañantes, todos hemos hecho un trabajo interno con nuestros propios procesos de duelo. Quienes acompañamos estamos y disponemos de un aprendizaje que nos permite abrirnos a los desafíos de la vida”.